Antes de nada haré una breve introducción sobre Ayutthaya; serán unas pocas líneas:

La ciudad fue fundada en 1350 convirtiéndose en la capital hasta 1767 y llegando a tener en el S.XVII un millón de habitantes. Se encuentra rodeada por la confluencia de 3 ríos, por lo que estratégicamente tenía un buen carácter defensivo y además se convirtió en un importante puerto internacional con una gran actividad comercial. Todos sus templos estaban cubiertos de oro pero los birmanos los destruyeron y saquearon. Las ruinas resultantes forman ahora el parque histórico de Ayutthaya, reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Puestos en antecedentes comienzo mi travesía:

Nos levantamos bien temprano para aprovechar el día, pues hoy teníamos 2 destinos: Ayutthaya y el Parque Nacional de Erawán. La recepcionista del hotel nos llamó avisando que nuestro chofer había llegado. Bajamos y nos sorprendimos al ver la furgoneta; parecía la del equipo A (algo tuneada, especialmente los bajos o faldones o como se llamen), por dentro iba muy bien equipada.
Por otro lado, el hombre no sabía ni papa de inglés. ¡Vaya plan! ¿cómo íbamos a decirle lo que queríamos entonces? Katy se pasó todo el viaje hablando por teléfono con alguien que le hacía de intérprete y para colmo no sabía el camino, de hecho dio la vuelta en varias ocasiones.

El caso es que después de hora y poco aparca y entendemos (por señas) que tenemos media hora. Estábamos en Bang Pha-In, para ver el templo de Wat Niwet Thamaprawat. En realidad eso lo descubrí después, en ese momento nos dejó allí y no sabíamos ni dónde estábamos. Había algunos puestecillos que vendían comida y gorros y me compré ¡2 por 3€! Y me vinieron de lujo para el viaje la verdad. Son ese tipo de cosas que te pones cuando no te ve nadie y no estás en España jaja. Nos acercamos a la orilla del río y vimos una especie de cesta colgante que servía para cruzar al otro lado a través de un cable suspendido y claro...para allá que fuimos, como críos super emocionados jeje.

En la otra orilla un monje se encargaba de controlar ese curioso transporte, desde lo alto de una torre "de control" por llamarlo de algún modo, a cambio de una donación. Apenas he encontrado información sobre este templo. Está al otro lado del río del Palacio Real y su principal atractivo es que posee un templo de estilo gótico "a la europea" así que nada que nos sorprenda. Ya que estábamos, entramos en la "iglesia" a que nos bendijera el monje. Nos sentamos de rodillas como hacían los lugareños (éramos los únicos occidentales) y agachamos la cabeza con las palmas juntas en señal de rezo, mientras el monje nos echaba agua de un cuenco con una especie de ramo de hojas secas. Posteriormente fue de uno en uno dándonos con las ramitas sobre la cabeza. En el caso de Sera, como no tiene pelo y el monje nos daba con ganas, pues parecía que le estaba fustigando. Como todo estaba en silencio se oían los golpes que le daba, por lo que no pude evitar abrir los ojos y mirar de reojo mientras se me escapaba la risa.

El siguiente destino fue Wat Phanan Choeng, donde pudimos ver una ceremonia en la que los fieles compraban telas naranjas que eran lanzadas a las personas que estaban sobre las manos del Buda (Luang Po To). Allí las enganchan con una cuerda hasta el hombro de éste y las devuelven a los fieles, que se cubren con ellas mientras rezan, para luego recogerlas y ser colocadas vistiendo a la representación de su divinidad. Os dejo un vídeo para que os hagáis una idea más afín a la realidad:




Tras la ceremonia Sera tocó el bombo (el que sale en el vídeo) y después salimos al patio trasero donde hay una hilera de campanas que todo el mundo hace sonar, y nosotros no íbamos a ser menos...
Este templo lo construyó el por entonces rey  Nam Pueng en el lugar en el que se suicidó la que iba a ser su futura esposa (una princesa china), motivada por la gran indiferencia que éste le mostraba. El Buda de 19 metros de altura data del año 1324 y dicen que lloró cuando sacudieron Ayutthaya.
La siguiente parada fue en Wat Yai Chai Mongkol (foto de la derecha). Está a las afueras de Ayutthaya, en el lado Este y ha sido el orgullo de los pueblos siameses desde el siglo 13.

La Gran Chedi (forma de campana) se construyó para conmemorar la victoria del rey Naresuan el Grande (ídolo del ejército tailandés y el héroe de todo Tailandia) sobre los birmanos cuatro siglos antes.

El lema del templo dice: "Aquellos que con una mente clara, viven la vida de la perfección, alcanzan la gloria. Aquellos cuya mente está inestable  y se lamentan en el camino de dolor, nunca llegarán a la plenitud de la sabiduría."



Nos emocionamos tanto al llegar viendo la chedi que no miramos al otro lado y nos perdimos el buda yaciente. ¡Que mal! Aunque suelo llevarme la lección aprendida, contaba con pillar un plano en la oficina de turismo. Pero como al final no llegamos en tren y alquilamos la furgo...pues se me desbarataron los planes. En fin... aguantarse toca. Me queda el consuelo de haber visto el enorme de Wat Pho en Bangkok. Además con las prisas y el calor no apetecía andar demasiado.
 
El siguiente destino era Wat Mahathatel templo más importante entre los cientos que hay en Ayutthaya, considerado el centro del universo y el centro de la fe, y por tanto ubicado en el centro de ciudad.
Además de albergar las reliquias de Buda, el Wat Mahathat era el lugar donde residía el Patriarca Supremo o el líder de los monjes Budistas. El complejo consta de más de 200 chedis, entre los que destacaba una gran Prang (torre) que colapsó en 1904.
Probablemente la cabeza de buda atrapada por las raíces de un ficus sea la imagen mas visitada de Ayutthaya.
La entrada cuesta 40baths y a menos que estéis realmente interesados en ver el buda del árbol, mi consejo es que optéis por ir a Wat Chai Wattanaram   en su lugar, pues éste no se conserva muy bien y en el que os recomiendo se aprecian mucho mejor los detalles.

Hacía un calor impresionante, eso que vivo en Murcia y estoy casi acostumbrada (alguien del norte como yo no se llega a acostumbrar nunca del todo al calor). Fue una maravilla descubrir que aquí también vendían las toallas que vimos en Bangkok. Es más, aquí nos las compramos tamaño casero. Íbamos con una toalla de lavamanos colgada al cuello y refrescándonos cada 2x3.

A continuación le dijimos al conductor como pudimos que nos llevara a Wat Phra Sri Sanpeth. Pues resulta que el Templo del ritual del vídeo linda con este por la parte de atrás, pasando las campanas, y no lo habíamos visto. La verdad que ese día andábamos un poco empanadillos... Total que el hombre nos llevó por el otro lado. Dentro nos encontramos con un grupo bastante extenso de niños que se preparaban para ser monjes y Adri estuvo más hábil que ninguno capturando esta foto que me encanta.

Wat Phra Sri Sanpeth fue construido como capilla privada para el rey ubicándolo en el centro del Palacio real, en el que no residían monjes, y albergaba una imagen de Buda cubierta de oro. Cuando los birmanos invadieron la ciudad, trataron de derretir el oro, causando el incendio tanto de la estatua como del templo. El buda actual es una réplica.  Se cree que los 3 chedis albergan las cenizas de tres reyes importantes y reliquias de Buda.

Se nos echaba el tiempo encima para ir al Parque Nacional de Erawán, en la provincia de Kanchanaburi. Así que nos fuimos corriendo para la furgoneta tras hacernos unas cuantas fotos, sin investigar mucho por el lugar. Si vais, dedicadle mínimo un día a esta ciudad, es más grande de lo que parece y realmente vale la pena. Si podéis, os diría incluso que os alojarais por aquí una noche para poder verlo iluminado, tiene que ser impresionante. Se que algún día volveré.

De camino a la furgoneta nos encontramos con los primeros elefantes que veíamos. Hacían paseos por la zona pero no eran muy largos y tenía planeado hacerlo en Krabi así que nos quedamos con cara de bobos mirando.
Mirad que curiosos son los tuc tuc en Ayutthaya:











A la llegada al lugar donde habíamos aparcado, el chofer no estaba, así que hicimos tiempo viendo el paisaje. Entre otras cosas: Wat Phra Ram y el lago del parque que tiene el mismo nombre. 

Os dejo un link con vistas 360º  web  de algunos templos. No está nada mal la web. Seguro que os entretenéis y ya no volvéis :P 

Y para terminar... ¿No sentís curiosidad por conocer el motivo del ataque y expoliación de Ayutthaya? resulta que a mediados del S. XV un rey Birmano quería ser obsequiado con uno de los numerosos elefantes blancos del rey de Siam, a lo que éste se negó. Increíble ¿verdad? Una guerra por un capricho no satisfecho...
Los elefantes blancos en Tailandia son sagrados y representan el poder real. Cuantos más tenga, mayor es su estatus.
El rey actual tiene 10.
Como nunca he visto uno de ese color y sentía curiosidad he buscado uno.

Como ya he dicho...íbamos con el tiempo justo así que partimos hacia las cascadas de Erawán.



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